Rafael Cox Alomar estrena oficina legal para atender nicho comercial y corporativo
Asesorará a empresas e individuos de Puerto Rico y el extranjero sobre
cómo aprovechar los tratados internacionales para beneficio de sus
negocios
lunes, 27 de mayo de 2019 – 12:00 AM
Por Rut N. Tellado Domenech
¿En qué país me conviene más invertir? ¿Puedo invertir en dólares o debo hacerlo en la moneda corriente del lugar? ¿Cuál es el marco legal y regulatorio? ¿Cómo me puedo proteger en caso de que haya una controversia?
Estas son algunas de las principales inquietudes que tienen empresarios puertorriqueños que exploran la posibilidad de invertir en otras naciones o exportar sus productos o servicios, de acuerdo con el abogado y profesor de derecho Rafael Cox Alomar, quien anunció la apertura de su oficina legal en San Juan.
“Vamos a ofrecer asesoramiento en asuntos de litigio general, litigio comercial,
asuntos corporativos, asuntos de arbitraje comercial internacional y doméstico y
asuntos de relaciones con el gobierno en Washington”, detalló Cox Alomar.
“Se nutre de todo lo que he venido haciendo en los últimos años”, agregó en alusión a su experiencia en la práctica de la abogacía en varias firmas legales en Washington DC y en Puerto Rico desde 2004, así como profesor en las escuelas de Derecho de la Universidad del Distrito de Columbia y la Universidad de Georgetown, ambas en la capital federal.
Esta es la primera vez que Cox Alomar cuenta con su propia oficina legal, la que lleva su nombre. “Se trata de una oficina ‘boutique’, pequeña, en donde yo voy a estar prestando directamente la mayor parte de los servicios, que serán a precios
razonables y que va a tener mucha atención al detalle”, sostuvo.
Junto a él trabajará el abogado Javier Sevillano, con experiencia en litigio general y comercial en el foro local y federal.
Apuntó que entre sus principales clientes, además de empresarios puertorriqueños con interés en exportar e invertir en otros países, habrá individuos y empresas del exterior que ponderan hacer negocios en Puerto Rico, así como locales y extranjeros que tengan asuntos que atender en Washington.
Acerca de qué le motivó a iniciar su propio negocio, respondió que la creciente
inversión extranjera en la isla abre la puerta a prestación de servicios relacionados
con el arbitraje comercial internacional, práctica que aún no está ampliamente
extendida en Puerto Rico a pesar de que desde 2012 el país cuenta con una Ley de
Arbitraje Comercial Internacional (Ley 10 de 2012).
“De cara al futuro, en Puerto Rico hay un espacio importante para el arbitraje comercial internacional. En la medida en que fluye inversión extranjera a distintos nichos de la economía, las disputas que surjan de esas transacciones, lejos de ir a tribunales domésticos, muy posiblemente se diriman en tribunales arbitrales, como pasa en muchos países que reciben inversión extranjera directa”, esbozó Cox Alomar. “Eso va a abrir unos espacios también para prestar servicios de
asesoramiento legal y estrategia de estructuración de inversión”.
Acerca del arbitraje comercial internacional, explicó que “la mayor parte de los
contratos comerciales contienen cláusulas de arbitraje que establecen que si surge
un conflicto entre las partes, ese conflicto se dirime por un tribunal arbitral
compuesto en su mayoría de tres árbitros nombrados por las partes”.
Una vez los árbitros emiten su laudo o decisión, se lleva ante un tribunal doméstico para que lo reconozca y lo haga cumplir. Si el laudo tuvo lugar en otro país, indicó que la Convención de Nueva York de 1958 establece que los laudos arbitrales foráneos serán reconocidos en Estados Unidos.
“El arbitraje es el modo preferido de solución de disputas de los grandes inversionistas porque los árbitros son personas especializadas en asuntos comerciales, el arbitraje puede ser confidencial si las partes así lo desean y puede ser un poco más rápido en la solución y, en algunos casos, más costoeficiente (que una demanda ante un tribunal)”, abundó Cox Alomar acerca de una práctica
con la que ya ha trabajado su oficina, que abrió en junio pasado.
Además, brinda asesoría a puertorriqueños y extranjeros en distintos tratados
internacionales, ya sean contributivos, de libre comercio o de protección de
inversión. Por ejemplo, “si eres un inversionista puertorriqueño que quieres hacer negocios en Colombia, debes conocer el alcance que tiene el Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos y ver cuál es la protección que hay para inversionistas con ciudadanía americana”, explicó el abogado, quien también es conocido como analista político.
“Si eres inversionista de un país que no tiene tratado con Estados Unidos y te interesa hacer negocios en Puerto Rico, posiblemente te interesa crear una subsidiaria en un país que sí tenga un tratado con Estados Unidos para beneficiarte de esa protección”, añadió.
Cox Alomar aspira a que la práctica de su oficina crezca a tono con el incremento de la inversión foránea en la isla y con en el interés de empresarios boricuas en internacionalizarse. “Ese es el nicho en el que nosotros estamos posicionados”, apuntó.
Published in El Nuevo Día on May 27, 2019